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viernes, 20 de enero de 2012

EL VERANO ESTIMULA EL APETITO SEXUAL DE LAS PAREJAS

En el mundo subsisten muchos mitos y leyendas en torno a la vida sexual de las personas. Existen alimentos, hierbas y hasta rezos que, se afirma, pueden devolver el vigor perdido o simplemente llevar a los hombres y  mujeres al paroxismo amatorio como nunca antes lo habían imaginado. También se señala que diferentes grupos raciales tienen ventajas con respecto de otros para hacer disfrutar a sus parejas sexuales de una manera insuperable. En casi todos los países del mundo, hay ciudades o regiones señaladas como cuna de los más ardientes ciudadanos de la nación, producto de las condiciones naturales, hábitos alimenticios, montañas, ríos, lagos o duendes. Hay algunos alimentos y especias a los que se les da un valor cuasi milagroso como afrodisiacos, pagándose fortunas por obtenerlos. Prácticamente la totalidad de esos cuentos y tradiciones carecen absolutamente de sustento científico alguno, pero sobreviven en la percepción y el imaginario popular, llegando a sugestionar a más de uno.

El calor es un argumento muy utilizado para asignar una conducta con mayor desinhibición a los habitantes de zonas geográficas de altas temperaturas. El término “sangre caliente” es recurrente entre quienes quieren expresar que las personas que habitan en zonas tropicales, suelen tener una especial disposición para dejarse llevar por los placeres de la carne. Para muchos, independientemente de la latitud, el verano es la época del año que resulta más propicia para la actividad sexual, habiéndose señalado que en el hemisferio sur hay una mayor incidencia de nacimientos entre septiembre y octubre, lo que se produciría por una mayor actividad de las parejas en la estación del calor. Una investigación llevada a cabo en Uruguay, da cuenta que las parejas estables tienen 3 veces más relaciones sexuales en la temporada veraniega que en la invernal. Lo mismo sucede con los varones solteros. En las mujeres entrevistadas, se reportaba que apenas se acercaban a duplicar su frecuencia durante el mismo periodo.

El 55% consideraba que un descanso de mayor calidad en la canícula, era un factor determinante para aumentar su frecuencia en relaciones íntimas. 34% consideró que en esa temporada vivía con menos estrés y 11% dijo que era más fácil encontrar momentos para sus momentos sexuales. El sexólogo charrúa Santiago Cedrés señaló que “las circunstancias son favorables hay mayor predisposición a desatar la pasión y las ocasiones para el encuentro sexual se multiplican”. Como responsable de la investigación, comentó que ésta incluyó a 115 parejas estables heterosexuales con integrantes de entre 25 y 55 años y a 50 hombres y 50 mujeres sin pareja de entre 20 y 35 años. Las parejas estables tenían una frecuencia de 3.2 relaciones semanales en enero frente a 1.1 veces en julio (invierno en el hemisferio sur). Las parejas jóvenes tienen mayor facilidad en verano para mantener relaciones sexuales sin interferencias, mientras que en los mayores, la ausencia de los hijos en la casa por una mayor vida social incrementa el tiempo que pasan solos. El incremento en la producción de hormonas como testosterona, serotonina y endorfinas, vinculadas con la libido y la sensación de placer, también sería un factor relacionado.

Para Fernando Urra, psicólogo director del Centro de Atención de la Universidad Central, en México,  el calor, el cambio de horario y el uso de menos ropa, son razones por las que se producen más embarazos en la temporada veraniega. Reseña que el cambio de los ciclos de vida como los horarios para levantarse, las jornadas de trabajo y la hora de dormir, que se dan en verano se relajan un poco ocasionando un impacto favorable en la conducta sexual “y algunos se ponen al día, o lo ven como un estado recreacional agradable”, afirma. Contrariamente a lo que se supone, no cree que el calor sea tan importante “porque si nosotros tuviéramos vacaciones en días  fríos, probablemente pasaría el mismo efecto”. Urra le da una importancia destacada a la vestimenta, “La estimulación visual también ayuda a aumentar el deseo. En periodos de mayor temperatura se ve más el cuerpo, aparecen en el caso femenino, los escotes, la ropa más delgada, más transparente y más corta, y eso aumenta la cercanía, más que un tipo de estimulación química u hormonal”, aseguró.


2 comentarios:

  1. El verano incita a beber, a bailar y tener sexo sin inhibiciones, por eso tienen tanto éxito las ciudades playa como Cancún, Punta Cana,Ibiza, etc. Muy buenas las fotos y los traseros de las niñas.

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  2. Gracias Darío. Es indudable que las ciudades que mencionan aprovechan la temperatura del ambiente para hacer un producto muy rentable que llama a la diversión y hasta al desenfreno.

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