Helen Keller nació el 27 de junio
de 1880 en Tucumbia, Alabama, EEUU,
en el seno de una familia de clase media, siendo su padre, editor de prensa. A
los 19 meses, en febrero de 1882 sufre una grave enfermedad diagnosticada como “fiebre del cerebro” (se
presume que fue meningitis o escarlatina). Al bajar la fiebre, su
madre notó que la niña no reaccionaba cuando sonaba la campana de cena, o cuando
pasaba la mano delante de sus ojos. Los médicos le confirmaron que había
quedado sorda y ciega a consecuencia de su mal. Los siguientes años fueron muy
duros para Helen y su familia. Ella se hizo una niña muy difícil, arrojaba
platos y adornos, aterrorizando a todos con rabietas, gritos y su mal humor. Tras sufrir varias crisis, sus padres toman los
servicios de una profesora personal, la institutriz irlandesa, Anne Sullivan, una mujer abandonada de
niña y ciega desde los cinco años hasta la adolescencia, cuando mediante
intervenciones quirúrgicas pudo recuperar la visión convirtiéndose en la alumna
más aplicada de su clase y graduada con honores.
Helen Keller y Anne Sullivan |
Visitando a soldados heridos |
Con el presidente John Kennedy |
No hay comentarios:
Publicar un comentario