La Fiscalía General de Indonesia ha ordenado el encarcelamiento del ex director general de la edición local de Playboy, Edwin Aranda, para que cumpla una condena de dos años de cárcel debido a la publicación de material considerado indecente.
El fiscal de Yakarta, Muhammad Yusuf, ha afirmado que su decisión se ha tomado después de que ayer llegara a su despacho una copia de la sentencia emitida por la Corte Suprema en julio de 2009 que sentencia a Aranda por la publicación de fotografías en las que aparecen mujeres con poca ropa. El ex director deberá presentarse en la fiscalía el lunes. Si no asiste a la citación, ésta será reiterada hasta en dos veces, después de las cuales será detenido y llevado por la fuerza pública.
Aranda ha sido condenado por el Tribunal Supremo después de que grupos islámicos radicales presentaran apelación a una primera sentencia absolutoria del Juzgado de Primera instancia del distrito sur de Yakarta en 2007 en la que el juez Efran Basuning, había dictaminado que las imágenes, en las que no aparecía ningún desnudo, no podían ser consideradas como pornográficas y que no violaban la ley. El Frente de Defensores del Islam -FDI-, se movilizó radicalmente en contra de la publicación de Playboy en el país
Tras la aparición del primer número en abril de 2006, varios activistas del FDI apedrearon las oficinas de la revista que dejó de emitirse al poco tiempo.
Indonesia es un país situado entre el sudeste asiático y Oceanía, conformado por 17,508 islas. Tiene una población de 250 millones de habitantes que lo ubican como el cuarto país más poblado del mundo. Es la comunidad musulmana más numerosa del planeta que practica, en su mayoría, un Islam caracterizado por lo moderado y la censura es históricamente mucho más tolerante que la de los países árabes. Su actual presidente es Susilo Bambang Yudhoyono quien fue elegido en 2004. Este país, que se independizó en 1945, ha tenido 6 presidentes destacando Suharto que gobernó desde 1967 hasta 1998.
Es insólito el grado de intromisión del Estado en la vida de los ciudadanos de este país que lindan con lo ridículo como lo reseñado en esta nota y sería digno de risa si no se tratara de un ciudadano cuyos derechos fundamentales están siendo vulnerados.
Parece broma, pero es dramático que los occidentales no comprendamos que lo que para nosotros puede ser natural, no lo es tanto para ellos. Dejemos que se organicen como mejor les parezca y no metamos las narices en sus casas.
ResponderEliminarMarco, nadie prtende inmiscuirse en asuntos ajenos. Sin embargo, sucede que el director de la revista ya había sido exculpado y debido a presiones ha sido sentenciado con 2 años de prisión. En cualquier caso, no podemos callarnos cuando a cualquier ciudadano del mundo se le pretende encarcelar por editar una publicación sea del signo que fuera. Eso es atentar contra las libertades y no podemos permanecer en silencio.
ResponderEliminarGracias por escribir.
Deberían prohibir todas esas inmundicias, estos moros si que tienen huevos para enfrentarse a la pornografía y la basura, hay que imitarlos en eso ya que en lo demás son un asco.
ResponderEliminarConsuelo: Gracias por opinar, pero discrepo contigo. Aprovecho para decir, en primer lugar, que es inadmisible que en pleno siglo XXI sigan llamando despectivamente "moros" a los habitantes del norte de Africa musulmana. Sin embargo y a manera de ilustración te recuerdo que Indonesia es un país situado entre el sudeste asiático y Oceanía, como se consignó en la entrada, cuya población está compuesta mayoritariamente por javaneses, seguidos por los malayos y madureses. Lo que nos sorprendió y pretendimos denunciar es que se estuviera persiguiendo y recortando los derechos del editor de una revista que, por cierto, no tiene nada de pornográfica.
ResponderEliminarNo creo que la cultura occidental sea intrínsecamente mejor que la no occidental. A los que preferimos una sobre otra, genial quedémonos en ella. Lo que sí es inadmisible es que se soslayen los universales derechos humanos.
ResponderEliminarSaludos.
Julián, que bueno encontrar un pensamiento lúcido al respecto. Los seres humanos somos diferentes y pensamos diferente. ¡Bienvenida la diversid!Lo que debe ser común es la tolerancia que anima a este blog y a muchos más y consiste en permitir a todos la libre expresión aunque sus conseptos e opongan a los nuestros.
ResponderEliminarMuy reconocido por tu lectoría.