JAPÓN RECONSTRUYE, GOBIERNO PERUANO NO FUE CAPAZ

Se espera que Japón deberá emplear en los próximos diez años  23 billones de yenes (unos 290 mil millones de dólares) en la reconstrucción en las zonas afectadas por el terremoto y posterior tsunami del 11 de marzo pasado. El Gobierno analiza la alternativa de recortar el gasto público en  500 mil millones de yenes (aproximadamente 6,300 millones de dólares) por año, además de vender activos del Estado y emitir bonos del tesoro para la reconstrucción. Las medidas se complementarían con un incremento de los tributos para recaudar el equivalente de unos 130 mil millones de dólares más. A fines de este mes se haría público el programa integral.

En los próximos cinco años se espera que el gasto para la rehabilitación de las zonas devastadas alcance una suma aproximada de 240 mil millones de dólares, que servirían para delimitar tierras afectadas, reubicar a los residentes y desarrollar infraestructuras de agricultura, ganadería y pesca. Una maquinaria trabaja en Japón para recuperarse de los efectos de esta catástrofe natural.

Al otro lado del Pacífico, en el Perú, hubo un terremoto en agosto de 2007: A pocos días de cumplir cuatro años, todavía hay personas que viven en carpas que fueron entregadas a los damnificados para atender la emergencia en los primeros días. Otros perdieron las carpas y han improvisado casuchas miserables hechas de retazos de madera y esteras. Hoy todavía se pueden ver escombros no removidos por la indolencia del gobierno de Alan García. La ineptitud  y desidia de los responsables de rehabilitar la zona afectada se puede graficar con tres ejemplos.

El Complejo Residencial para Pisco-Mapfre fue prometido por el gobierno. El propio García, acompañado de periodistas y pobladores, colocó la “primera piedra” simbólica del proyecto. Nadie puso jamás la segunda. Irónicamente un panel le dice a los desconcertados pobladores “Alan cumple” La obra debía ejecutarse en 150 días, pero hoy 308 familias que perdieron sus viviendas en el feroz terremoto, siguen esperando.

En el asentamiento humano Alto El Molino, 1.500 familias, cerca de 5 mil personas, viven desde el terremoto, . Solo hay un policía que ni siquiera tiene una bicicleta para movilizarse en un terreno de 25 hectáreas. En agosto del 2009 el Congreso aprobó la expropiación de 256.685 metros cuadrados para reubicar a los afectados. Sin embargo, a la fecha ninguno tiene título de propiedad.

El 5 de agosto del 2008, el ministro de Salud, Hernán Garrido Lecca, colocó la primera piedra para el hospital San juan de Dios. El 29 de junio de 2011, el Presidente Alan García “inauguró” el nosocomio como parte de la millonaria campaña publicitaria que ha iniciado con miras a mejorar su popularidad y gozar de un buen recuerdo cuando intente postular en 2016. Anunció que costó un equivalente de 20 millones de dólares y que estaba totalmente listo para operar. Las autoridades locales no asistieron a la ceremonia pues según el director regional de Salud de Ica, doctor Rubén Brizuela, con suerte estará listo en enero de 2012, porque “no ha concluido su etapa física, no está implementado ni equipado, no se han levantado observaciones, tampoco se produjo la entrega de obra y menos aún fue sometido a la prueba del vacío como exigen las normas de la Organización Mundial de Salud”.

.