Una singular iniciativa ha sido puesta en marcha en la ciudad alemana de Bonn, con ella se pretende gravar con seis euros la “ocupación del suelo público” por parte de las profesionales del sexo, que se calcula sean 200 en las vías públicas, según anunciaron las autoridades de la ciudad alemana. A partir de ahora, las prostitutas deberán sacar un boleto de un distribuidor automático cada noche que trabajen. Lo harán en un procedimiento similar al empleado para el aparcamiento público y tendrá que ser mostrado ante cualquier eventual control policiaco, explicaron. La carencia de este documento generará sanciones administrativas para las mujeres que incumplan el procedimiento. La tarifa desde las 8:15 pm hasta las 6.00 am del día siguiente asciende a 6 Euros.
Varios revisores patrullarán por Bonn controlando que todas las mujeres hayan sacado el ticket correspondiente. Bonn quiere convertirse con ese procedimiento en pionera en toda Alemania. “Es una cuestión de justicia social”, ha declarado la vocera municipal. Monika Froembgen, quien aclara que las prostitutas que ejercen en burdeles, saunas o centros eróticos ya pagan impuestos.La administración de Bonn prevé la recaudación de 300 mil euros con esta iniciativa, sin contar con lo que se recaude por multas a quienes no cumplan con este tributo, las que serán sancionadas con 100 Euros de multa. El primer puesto para retirar los tickets se encuentra en la calle Immenburg, al lado de un sex shop, un local de parqueo público y seis cabinas de madera que podrán ser ocupadas por las trabajadoras sexuales. En Alemania la prostitución es legal desde 2001, cuando el gobierno de Schroeder aprobó la ley en el parlamento.
Bonn, ciudad a orillas del Rin, fue la capital de la República Federal de Alemania o Alemania Occidental hasta 1990 en que se reunifica con la Alemania Oriental tras la caída del Muro de Berlín en 1989. Hospedó al gobierno alemán hasta 1999. Tiene 320 mil habitantes y entre los personajes célebres nacidos en su suelo, destaca Ludwig Van Beethoven. Hoy es una ciudad de más de 30 mil jóvenes universitarios, muchos de ellos extranjeros. Tal vez esa sea la razón por la que alberga más de 550 locales de ocio como bares, pubs y discotecas. Además cuenta con una ópera, 12 teatros y decenas de salas de cine. Es una ciudad alegre y con agitada vida nocturna.
No entendí lo de las seis cabinas de madera. ¿Se las van a prestar para que brinden sus servicios allí a cambio de los 6 euros?
ResponderEliminarBueno, si se puede considerar que garchar sea un servicio.
El capitán Pantaleón Pantoja lo llamaba "prestaciones". De cualquier manera parece que sirven para esos fines.
ResponderEliminar