CUBA SIGUE AFECTADA POR EL BLOQUEO MÁS LARGO DE LA HISTORIA MUNDIAL

El 3 de enero de 1961, el presidente Eisenhower cortó relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y Cuba. Siendo presidente John F. Kennedy, el 15 de abril de 1961, aviones estadounidenses con insignias cubanas, atacaron los aeropuertos de San Antonio de los Baños, Ciudad Libertad y Santiago de Cuba, causando daños de consideración. Al día siguiente se declaró el carácter socialista de la revolución, siguiendo las ideas marxistas leninistas. El 17 de abril se produjo una gran invasión en Bahía de Cochinos. Sus participantes eran exiliados cubanos entrenados y armados por la CIA en Nicaragua para derrocar a Fidel Castro. Tenían una flota de 5 barcos, quince lanchas de desembarco, 1.500 hombres fuertemente armados, 16 aviones B-26, 5 tanques, camiones y artillería, pero enfrentarían una fuerza de más de 30.000 hombres dirigidos por el propio Fidel Castro. Las fuerzas cubanas repelieron los ataques  y en la mañana del 19 de abril la brigada invasora había sido derrotada. Los cubanos celebran esa epopeya como “la primera derrota del imperialismo yanqui en América”.

El 3 de febrero de 1962, el Presidente Kennedy decretó la Proclama  3447 que impuso el bloqueo sobre el comercio entre su país y Cuba. Encomendó al Secretario del Tesoro ponerlo en práctica  respecto a las importaciones y al Secretario de Comercio ejecutarlo en el campo de las exportaciones.  Ambas secretarías fueron autorizadas a administrar y modificar el bloqueo. La Proclama entró en vigor el 7 de febrero. Según las autoridades cubanas, ninguna actividad económica cubana ha estado exenta de sufrir los severos daños causados por el bloqueo contra Cuba. Los impactos concretos han sido exhaustivamente cuantificadas por expertos cubanos quienes han anunciado que su país ha soportado pérdidas directas e indirectas por más de 200 mil millones de dólares, aparte de los 54 mil millones de dólares imputables a daños directos ocasionados a objetivos económicos y sociales del país por los sabotajes y acciones terroristas organizadas y financiadas desde territorio de los Estados Unidos.

A pesar que este bloqueo se ha extendido por casi 50 años, Cuba ocupa el puesto 51 en el Índice de desarrollo humano elaborado por la ONU (el cuarto entre los países latinoamericanos, después de Chile, Argentina y Uruguay).[] Además, Cuba sería el único país del mundo que cumple los dos criterios que, para la organización WWF, significan la existencia del desarrollo sostenible: desarrollo humano alto (IDH > 0,8) y huella ecológica sostenible (huella < 1,8 ha/p).

En agosto de 2011, la poderosa institución financiera estadounidense JP Morgan Chase pagó una multa de 88,3 millones de dólares por violar restricciones instituidas por Estados Unidos para tratados comerciales con Cuba, Irán y Sudán. Según la Oficina de Control de Bienes Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro, JP Morgan procesó 1 711 transferencias  a personas físicas o jurídicas cubanas por un valor cercano a 176 millones de dólares. Las transacciones relacionadas con La Habana ocurrieron entre el 12 de diciembre del 2005 y el 31 de marzo del 2006. Otras entidades bancarias han sido objeto de medidas extraterritoriales del bloqueo. La sentencia contra el JP Morgan Chase es la cuarta mayor impuesta por Washington desde la presidencia de George W. Bush, cuando fueron reforzados controles relacionados con el bloqueo económico contra Cuba. 

Contrariamente a lo que los gobiernos de EEUU supusieron, el bloqueo económico sirvió de soporte moral al régimen cubano de cara a su pueblo y es una de las razones por las que han cumplido 52 años en el poder. Además de inhumano, ha sido absolutamente ineficaz.